Análisis de sangre y orina

Muchos de los compuestos que tu cuerpo utiliza o produce se transportan en la sangre o se excretan por la orina. En esta sección se explica por qué se usan análisis de sangre y orina en la esclerodermia, y qué pueden mostrar los resultados.

 

Se estudia:

  • Niveles de diferentes sustancias químicas, proteínas y células del cuerpo.
  • Signos de que el sistema inmunitario de tu cuerpo está activo (inflamación, anticuerpos o autoanticuerpos).
  • Signos de que algunos órganos de tu cuerpo no están funcionando como deberían.

 

Qué esperar:

Las agujas y los análisis de sangre van de la mano, por lo que, si te desagradan especialmente las agujas o la sangre, informa a la persona que extrae la muestra para que pueda minimizar cualquier sufrimiento. En el caso de los análisis de orina, por lo general tendrás que recoger orina en un pequeño recipiente de plástico. Es posible que se te pida que no desayunes (se conoce como prueba “en ayunas”), que evites determinados alimentos y que no tomes la medicación habitual antes.

 

Comprender tus resultados:

Los análisis de sangre y orina suelen utilizarse para estudiar qué está ocurriendo en el organismo y para observar si tus órganos están funcionando adecuadamente. Tu médico prestará especial atención a cualquier autoanticuerpo.

 

Anticuerpos y autoanticuerpos

Los “anticuerpos” son pequeñas proteínas que son una parte clave de las defensas naturales de tu cuerpo contra las bacterias y virus. Buscan y se adhieren a los invasores, lo que ayuda a tu sistema inmunitario a localizarlos y deshacerse de ellos. Los “autoanticuerpos” son anticuerpos que se dirigen hacia las células del cuerpo en lugar de a los invasores. A menudo, las personas con esclerodermia tienen autoanticuerpos en la sangre. Esto puede ser una causa de inflamación.

 

¿Sabías qué…?

Los autoanticuerpos más frecuentes en las personas con esclerodermia son:

Anti-topoisomerasa I (anti-Scl-70).

Anti-centrómero (ACA).

Anti-ARN polimerasa III.

También se denominan anticuerpos antinucleares (AAN). Contribuyen al diagnóstico y también pueden ayudar a predecir determinadas complicaciones.1-5

 

 

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“Intenta obtener toda la información que puedas de tu médico. Los médicos son los expertos. Toma notas y no temas hacer preguntas.”

Sergio

 

Referencias

  1. Van den Hoogen F, et al. 2013 Classification criteria for systemic sclerosis. Rheumatism 2013;65(11):2737–47
  2. Allanore Y, et al. Systemic sclerosis. Nat Rev Dis Primers 2015;1:1–21
  3. Jaeger V, et al. Incidences and risk factors of organ manifestations in the early course of systemic sclerosis: a longitudinal EUSTAR study. PLoS One 2016;11(10):e0163894.
  4. Nihtyanova S, et al. Prediction of pulmonary complications and long-term survival in systemic sclerosis. Arthritis Rheum 2014;66(6):1625–35.
  5. McNearney T, et al. Pulmonary involvement in systemic sclerosis: Associations with genetic, serologic, sociodemographic, and behavioural factors. Arthritis Rheum 2007;57(2):318–26.

 

ILD.0034.012020

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